¿Cómo ser Florencia y no morir en el intento?

Florencia es una mujer que vive situaciones típicas, pero con hombres atípicos. Ella me pregunta por qué me llama tanto la atención su vida y yo le digo que ella es lo que llamamos una mujer cabrona. Ella se enoja, pero yo le digo que ser cabrona es lograr poner su cabeza ante su corazón, vive la vida, no se amarga con nada, se cae y a los 10 minutos ya se está levantando y cree fielmente que la vida es para comenzarla una y otra vez, ya que los comienzos son lo mejor. Dice que entonces así sí.
Yo la llamo mi Pepe Grillo, ella dice que es mi despabilamiento diario, ya que me da de retos y zamarrones cada vez que me acuerdo del EX. Flo me recita una y otra vez que si quiero aprender a ser CABRONA debo dejar de andar pensando en el EX como el único amor de mi vida y que al fin debo ser una mujer libre. Yo simplemente le contesto que ser ella es más difícil de lo que yo creía. Entonces me respondió: al menos inténtalo. Le pregunté ¿Cómo ser Florencia y no morir en el intento?. Me miró con cara de te doy de cachetada si vuelves a preguntar y me dice: al menos lo intentaste.

Mi lista de blogs

lunes, 29 de marzo de 2010

Sincero: un concepto que ni la RAE nos puede explicar

Luego de mucho tiempo de haber transcurrido el suceso, comentado a continuación, logré recordar, para mi mala suerte, la única frase replicable que salió de boca de Javier: “Esto queda hasta aquí, porque ya estoy con otra, quise comentártelo porque pretendo ser SIN-CE-RO contigo”. Ja-ja-ja, no quiero que me tomen a mal. Esta risa media burlesca no viene desde los celos, ni tampoco desde la rabia de haber sido despachada, solo viene del extraño concepto de SINCERIDAD que me acaba de mencionar. En ese mismo instante fue cuando mis oídos cerraron compuertas, para dejar de escuchar tanta estupidez. Al rato de llorar de, aun no me explico qué, me pregunté, cómo pude salir con este tipo que confunde lo cara de raja con sinceridad. Ja-ja.ja una vez más.

Ya pasaron meses desde aquel momento que luego de largo rato de pena, me llenó de risa.
Sólo hoy vine a recordar tan extraño concepto, luego de escuchar a una amiga cuando le decía a otra: “se lo que hice, se que estuvo mal, pero por algo te lo cuento, porque quiero ser sincera contigo”. Ahí me di cuenta de que algo andaba mal.

Mi gran duda era si yo entendía mal el concepto o realmente mi mundo paralelo, me hacía toparme con gente inepta. Ja nuevamente.

Para dejar las cosas en claro, mi definición de sinceridad se refiere a decir, sentir o hacer algo veraz, exento de hipocresía o simulación. En conclusión, no vale escudarse en la sinceridad, para justificar actos que sabemos que están mal. Es decir, de qué me valía que Javier fuera sincero, si ya la había cagado. Es como decir, señor policía, sé que robé, que maté y que mentí, pero vine para contarlo, porque quiero ser sincero, prémieme por eso. O sea es como si creyeran que ser sincero equivale a buena gente, aunque se hayan mandado el condoro de sus vidas. Y aquí viene un gigante y estruendoso JA.

Bueno, solo por darle derecho a duda y defensa a este tipo y al resto de la humanidad que cree en esto, es que me di el tiempo de buscar la definición en Internet. Obviamente, recurrí a mi primera fuente RAE (Real Academia Española) y me dije a mi misma, oye misma, si la definición que dio, cierto tipo, es correcta, corresponde que te des un tremendo JA a ti misma y acepté. Y el resultado fue el siguiente:

Búsqueda: Sincero.
(Del lat. sincērus) : O sea, ya tengo complicaciones cuando la dicen en español,
menos me va en Latín, se los aseguro.

1. adj. Que actúa con sinceridad. : Cómo vamos a saber lo que es ser sincero, si ni
siquiera sabemos el real concepto.

2. adj. ant. puro ( libre de mezcla): Les aseguro que de puro nada y aquí ya me
huele a que nos fuimos por otro lado. Primero voy a
partir por lo básico que es pedir congruencia respecto
a la sinceridad y ya después nos vamos por lo más
complicado que es andar exigiendo pureza, aunque
creo, que para éstas altura, ya es demasiado tarde.

Que desilusión, si ni la RAE nos puede explicar lo que significa la sinceridad, que le voy a pedir a ese pobre diablo que entienda sobre esa palabra. Que más que sentir pena, por el simple hecho de pensar que así como da ese tipo de sinceridad, es la misma que va a recibir o que ya recibe, porque es la única que conoce hasta ahora.

Sólo espero que la gente que me rodea, así como mi familia y amigos, entendamos que no podemos cubrir nuestros errores con la sinceridad y que no basta con hablar como personas sinceras, si no también actuar de forma sincera, para evitar tomar como un valor, algo que realmente apesta en las personas. Ahora cuando me mande un condoro y creo haber aprendido de mis propias palabras, espero decir: Te lo cuento porque quiero reconocer que hice algo incorrecto y no porque quiero ser una persona más sincera, porque de ser así entonces me considero el ser menos sincero del mundo, pero sí congruente con mis pensamientos y palabras.

Como dice el dicho:

“Cuida tus pensamientos, que se convierten en palabras;
cuida tus palabras, porque se convierten en actos;
cuida tus actos, porque se convierten en hábitos;
cuida tus hábitos, porque se convierten en carácter;
cuida, finalmente tu carácter porque en él te juegas tu destino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario